Los duques de Cambridge viven entre el palacio de Kensington y su casa de campo en Anmer Hall, en Sandringham. Pero tienen una tercera residencia real, casi desconocida, llamada Tam-Na-Ghar Cottage. Se trata de una finca en Balmoral, situada en el condado escocés de Aberdeenshire.
El lugar elegido por Kate Middleton y el príncipe William para vacacionar es una pequeña propiedad de tres habitaciones que la Reina Madre le regaló al príncipe antes de morir y es su verdadero refugio. Allí consolidaron su relación y pudieron vivir lejos del acoso de los paparazzi.
La propiedad se encuentra muy cerca de Birkhall, la residencia del príncipe Carlos, lugar elegido para pasar el confinamiento por la pandemia del covid junto a su pareja, Camila Parker Bowles.
Es una pequeña cabaña de la que casi no se han publicado fotos y donde el hermano de Harry y su familia se aislan de las miradas indiscretas.
La discreta casa fue su lugar elegido desde que empezaron a salir. En Escocia compartieron sus años de estudiantes en la Universidad de St. Andrews, donde la pareja estudio Historia del Arte.
Según sus amigos, allí guardan recuerdos inolvidables y ha sido la locación en la que probablemente vivieron su época más feliz como pareja.
En mayo pasado y después de cumplir su décimo aniversario de casados, Kate y William regresaron al lugar donde se enamoraron. En esa oportunidad, la pareja hizo un minitour por Escocia y pasaron un día en la institución en la que se conocieron y forjaron su historia de amor durante el primer año de sus estudios, en 2001.