Hoy se cumplen 21 años de la desaparición física de Rodrigo Bueno. Una madrugada del 24 de junio del 2000 perdía la vida en un accidente de autos en el kilómetro 27,5 de la autopista Buenos Aires. El carismático cantante cordobés, se fue de este mundo a los 27 años. Su hijo Ramiro Bueno le rindió un sentido homenaje.
"Que tu alegría y tu música nos sigan inundando de amor por toda la eternidad. La gente te mantiene vivo, tu esencia sigue vigente", comenzó diciéndole Ramiro a su padre en una conmovedora carta, tras dar positivo de coronavirus según reveló Ángel de Brito en el testeo de Telefé.
"Hay cosas que no se pueden explicar con palabras, pero se que te lo diría todo con solo un abrazo, te amo, te extraño, te necesito. Ojalá algún día mi muerte nos pueda volver a encontrar", escribió el ahora músico.
El joven de 24 años abrió su corazón y añadió: "Mientras tanto la sigo luchando por todos los que me quisieron ver feliz alguna vez. Como vos perseguiste tus sueños, yo persigo los míos... Y sé que en cada abrazo de mamá vos también me lo estás dando".
Para cerrar, Ramiro mostró su estado de ánimo actual y dijo: "Hoy te lloro, mañana celebro otro día cargando con el orgullo de ser tu hijo. Te amaré por siempre...".
El 5 de abril de 1990, Rodrigo se ganó el apodo de "El Potro". Fue en Buenos Aires gracias a un animador de la Calle Rivadavia. Lo vio con pelo largo y los ojos claros; y lo bautizó para siempre. "Córdoba parece un zoológico, tenemos a La Mona (Jiménez), Pocho (La Pantera), y ahora El Potro", bromeaba el artista en una de sus últimas entrevistas.
"Hasta que yo compuse ´Lo mejor del amor´ era un taboo hablar de amantes. Hice sacar un montón de caretas. La gente estaba necesitando contenido de letras, pero también alegría", alegaba Rodrigo entrevistado por Marcela Tinayre. Entre sus grandes himnos, éste es el preferido de su fiel público que como dice uno de sus temas, no morirá jamás.
