En la contienda que mantiene la Corona inglesa, ahora le tocó el turno de hacer su descargo al príncipe William. Luego de las explosivas declaraciones de su hermano y su cuñada, el príncipe Harry y Meghan Markle, en las que entre otras cosas acusaron a la familia de la Casa Real británica de racista, el heredero al trono del Reino Unido fue contundente: “No somos una familia racista”.
Si bien la reina Isabel II, a través de un comunicado oficial, remarcó que toda la familia del Palacio de Buckingham está dolida y que se va a encargar de investigar el caso de racismo que nombraron, su hermano William, el mayor de los hijos de Lady Di y Carlos, se despegó y negó todo lo que dijeron Harry y su mujer.
Luego de la visita a un colegio de Londres, en la campaña que está llevando a favor de la salud mental de los niños, fue consultado sobre el escándalo que los golpea de cerca. Puntualmente, le preguntaron sobre si había hablado con su hermano luego de la entrevista que brindó: “No, no he hablado con él, pero lo haré”, remarcó.
Más allá de no precisar si lo va a llamar por teléfono o si lo hará cara a cara, ese encuentro podría darse el 1º de julio, fecha en la que Lady Di, madre de ellos, cumpliría 60 años. Con motivo del recordatorio, esa fecha se descubrirá una estatua en su honor y se espera que ellos estén y sean parte de esa cita.
Mientras todo esto acontece, vale recordar que el príncipe Harry y Markle están viviendo, desde hace casi un año, en Los Ángeles, por eso la cotidianidad no se da entre ellos. Allí es donde piensa criar al pequeño Archie y al bebé que viene en camino. Cansados de las responsabilidades de Londres, de todo lo que rodea a la Corona, prefieren otra vida para la familia.
