Desde que el Príncipe Harry (36) y Meghan Markle (39) se sentaron a charlar públicamente con Oprah Winfrey (67), la realeza británica no volvió a ser la misma. De hecho, los medios nacionales califican la situación como una de las "peores crisis" de la institución en décadas.
Pero no todas son pálidas para la corona. Esta vez es Samantha Markle (56), la hermana de Meghan, la que salió a dar un fuerte mensaje en su contra.
Fue a raíz de que Meghan dijo en la entrevista que "no la conoce", que llevan 19 años sin verse y que cambió su apellido a Markle a raíz de que ella empezó a salir con el Príncipe Harry.
En charla con Inside Edition, su hermanastra mostró una foto de ambas posando juntas en su graduación, en el año 2008 (es decir, hace trece años) y un documento de su petición de cambio de apellido, que se remonta a 1997.
Además, acusó a Meghan de utilizar la salud mental como justificación para comportarse de forma mezquina con los demás –"La depresión no es una excusa para tratar a la gente como trapo y echarlos a la basura", dijo con severidad– y aseguró que ve en ella "un trastorno narcisista de la personalidad" y que "necesita ver a un especialista". Por otra parte, el Príncipe Harry tampoco salió bien parado de sus palabras.
De él dijo que le parece que tiene Síndrome de Estocolmo: "Lo siento por Harry. Fue víctima de su propia negligencia, y yo lo llamaría sociopatía... Ella lo alejó de su familia, de todos sus amigos, de la vida que conocía. Me recuerda a esas víctimas de secuestro que se enamoran de sus captores".
