Pasaron tres meses de la muerte de Diego Maradona y la investigación sigue despertando más sospechas respecto de los cuidados que recibió el astro y si se podía haber evitado su deceso a poco de someterse a una cirugía.
En las últimas horas, Gianinna y Jana se presentaron en la sede de la Fiscalía General de San Isidro, en la calle Acassuso 476, para ampliar sus declaraciones en calidad de testigos. Sus dichos complicaron la situación del médico personal, Leopoldo Luque, y de su equipo.
“Lo vi alcoholizado y en alguna oportunidad creo que estaban presentes Luque o Cosachov”, contó Jana frente al equipo de fiscales coordinado por el fiscal general de San Isidro, John Broyad, e integrado por sus dos adjuntos, Cosme Iribarren y Patricio Ferrari, y la fiscal de Benavídez, Laura Capra.
Tras la declaración de Jana fue el turno de Gianinna Maradona, quien declaró y también apuntó contra el famoso entorno del Diez: "A mi papá le daban una pastilla misteriosa para que si tomaba alcohol le diera asco o rechazo".
Luego explicó la situación con respecto a la falta de comunicación que tenían sus hijas con Diego. “A mi papá le cambiaban el teléfono constantemente. Mi papá no sabía usarlo, no sabía cambiar el chip. Sólo sabía mandar mensajes de voz. Y siempre había alguien dictándole”.
De esta manera la situación penal de los imputados se complica en torno a las acusaciones de "homicidio culposo" del Diez.
