Los problemas de Julieta Prandi con su ex pareja no paran. Después de que el padre de sus hijos no cumpliera con lo acordado en las visitas y los dejara solos en la vereda, un fallo de la Justicia a favor de Claudio Contardi cargó más las tintas de la modelo, hasta el punto que se mostró muy sorprendida y hasta resignada por lo ocurrido.
Prandi había pedido que la Justicia interrumpa el régimen de comunicación con los menores después de aquel incidente, pero según la resolución de un juzgado podrá seguir viéndolos.
La noticia le cayó como un balde de agua fría a Prandi: en el programa de radio donde participa expresó que este fallo no es lo que esperaba y que siente temor por ellos.
“Hoy los tengo conmigo, pero nada quita que venga a la puerta de mi casa, me cague a trompadas y me saque a los chicos, porque el juez y la Justicia lo están avalando. Espero que este fin de semana no tengamos noticias desagradables”, señaló la conductora en un móvil con Implacables (El Nueve), y agregó que su hijo mayor es el más afectado por la situación: “Mateo no quiere saber nada de ir con el padre”.
La modelo se mostró indignada por la resolución judicial y realizó un fuerte llamado de atención: “No sé qué más tiene que pasar. Si no fuese famosa y no tuviese a Ana Rosenfeld, que hace visible mi caso, yo podría estar muerta. Es de un grado de violencia absoluta y de una negligencia gravísima”, advirtió, en un contexto en el que se suceden día a día los casos de mujeres asesinadas por sus ex parejas.
En medio de los casos de femicidios como el de Úrsula Bahillo, la conductora de Sarasa reflexionó: “Estamos hartas de ver en televisión casos de mujeres que, la que se salva, aparece toda golpeada. Yo fui amenazada de muerte, pasé todo tipo de violencia, y mis hijos fueron testigos. Ya me cansé de denunciar y que miren para otro lado”.
