Carmen Barbieri contrajo el virus de COVID-19 hace 10 días e inmediatamente, por ser una paciente de riesgo, fue internada en la Clínica Zabala. El 28 de enero, con la noticia de que la habían pasado terapia intensiva, su hijo, Fede Bal, apareció a través de sus redes sociales para llevarle energías a su mamá. “Les pido a todos los creyentes, y no creyentes, que pidan y manden lindas energías para mi vieja”.
El cuadro se complicó durante la jornada del sábado 30. La saturación de oxigeno en sangre, que de por si no era la mejor, bajó más, y los profesionales que la atienden decidieron inducirla a un coma farmacológico para poder intubara. De esta manera, buscan que esté tranquila, poder hacerle llegar el oxigeno de una mejor manera para que el porcentaje no siga bajando.
Fede no atraviesa su mejor periodo por esto que está viviendo desde hace una año. El fallecimiento de su padre en diciembre de 2019, el cáncer que atravesó él en plena pandemia el año pasado, y ahora esto de Barbieri, lo tiene golpeado. Pero sigue con la guardia alta, sin bajar los brazos esperando la recuperación de Carmen.
En las últimas horas, el actor se hizo presente a través de sus redes sociales con un emotivo posteo. Compartió una imagen en la que se lo ve a él de chiquito, a upa de Carmen y con Santiago abrazándolos a los dos. “Así, te abrazamos fuerte, para que estés bien. Desde siempre”.
Inmediatamente los mensajes de apoyo y las muestras de cariño de sus seguidores y de sus colegas no se hicieron esperar. La capocómica vive un momento complejo y las próximas horas serán cruciales en la búsqueda de una mejoría. Ante este contexto, las oraciones en cadena pidiendo por su salud se volvieron recurrentes.
