Invitada al programa Los Mammones (América), Soledad Fandiño (38) recordó una anécdota que le tocó vivir tiempo atrás. La conductora le explicó a Jey Mammon que bebió demasiado vino en una cena que le tocó compartir con Rubén Blades.
"Fue una vergüenza total", detalló al señalar que el evento se había realizado en la casa del cantautor panameño. Ella había asistido junto a su pareja de entonces, el cantante René Pérez, "Residente". Fue en el año 2014, cuando el autor de Pedro Navaja los había hospedado en su hogar.
"Estábamos con René en Nueva York y Rubén nos dice: 'Tengo una habitación de huéspedes nueva. La terminamos de decorar hace poco con mi mujer'", contó y agregó: “La mujer es una divina; el cuarto todo decorado en colores pastel, y nos dijo que nos sintamos como en nuestra casa”.
Recordó que Blades interpretó un largo repertorio y les anunció que estaba próximo a lanzar un disco de tangos. "Me cebé más todavía... Yo, re orgullosa de Argentina. Pedí más vino tinto. René no estaba tomando, sólo lo hacíamos Rubén y yo. Terminamos, él se fue a la habitación con su mujer y nosotros a la de huéspedes color pastel", expresó la conductora de Santo Sábado (América).
"Me pongo el pijamita, me tiro en la cama y duré dos segundos. Empecé a gritar '¡me muero, me muero!', una cosa tremenda. Sentía que se movía todo. Era el Titanic hundiéndose", indicó sin poder de parar de reírse.
Además, confesó que se la pasó vomitando toda la noche, “como nunca en mi vida. Obvio que le dije a René que no dijera nada. Limpiamos todo como si se tratara de la escena de un crimen y quedó impecable”.
