Los tabloides británicos todavía se hacen eco de la decisión de la reina Isabel II en el mes de noviembre, que el Día de Armisticio dejó fuera de la ofrenda floral a los duques de Sussex, según el Daily Mail.
Sin embargo, los duques no salen del ojo de la tormenta, ya que la carta publicada por Meghan Markle y el príncipe Harry en la web de su fundación Archewell, con motivo del inicio del 2021, no cayó para nada bien.
La carta está acompañada con unas imágenes difuminadas y en fundido de Meghan y Harry con sus respectivas madres, Doria Ragland y Diana de Gales. En el escrito se habla exclusivamente de ellas, las madres, y se suprime totalmente a los padres.
"Soy el hijo de mi madre. Y soy la madre de nuestro hijo. Juntos traemos Archewell. Creemos en lo mejor de la humanidad. Porque hemos visto lo mejor de la humanidad. Hemos experimentado compasión y bondad, de nuestras madres y de extraños por igual. Frente al miedo, la lucha y el dolor, puede ser fácil perder esto de vista. Juntos podemos elegir coraje, sanación y conexión. Juntos podemos optar por poner la compasión en acción. Te invitamos a unirte a nosotros mientras trabajamos para construir un mundo mejor. Un acto de compasión a la vez", dice el mensaje.
En ninguna parte se refiere al polémico padre de Meghan, con quien ella mantiene una muy seca relación, ni tampoco se nombra al papá de Harry, el príncipe Carlos.
Phil Dampier, experto en la realeza, asegura que el príncipe Carlos está preocupado por la utilización de la imagen de Lady Di en este tipo de proyectos. "No creo que se alegre si Harry parece explotar el status icónico de su madre", afirma Phil.
