Anoche, en el programa de Andy Kusnetzoff (50), la nutricionista Romina Pereiro (42) comenzó a ver en la pantalla imágenes de su vida, y no pudo ocultar su sorpresa y emoción cuando apareció una foto de su casamiento, que la mostraba junto sus hijas Violeta (9) y Emma (7), y a Morena (21) y Rocío (21), hijas de su marido, Jorge Rial (59).
Inmediatamente después de verla se emocionó y le brotaron las lágrimas. Cuando pudo hablar lo miró a Andy y exclamó: "La foto del final me mató. Me impactó. Dije ‘no voy a llorar’, pero un poco es de felicidad y otro poco es... bueno, no es fácil ensamblar familias. Hay situaciones previas a mi historia con Jorge que no tienen que ver conmigo y que yo trato de acompañar desde el lugar que puedo".
Con más voz, Romina comenzó a recapitular su reciente historia familiar: "Nosotros nos casamos con muchas ganas de que la familia se ensamble naturalmente, como que tratamos de no forzarlo. Los dos veníamos con otras historias, edades diferentes de las chicas. Eso en un punto ayudó, porque al ser las mías muy chiquitas y las de él más grandes como que enseguida se hicieron compinches".
"Tuvimos momentos muy buenos como familia ensamblada, otros no tanto. Hay cosas que yo prefiero no tocar personalmente, pero lo que sí quiero que quede claro es que hay mucho amor. Y que el amor siempre va a estar".
"Yo vengo de una familia con vínculos muy fuertes, y me crié así. Siempre hay problemas en todas las familias, pero problemas más normales, más cotidianos", dijo, haciendo clara referencia a los últimos comentarios de Morena sobre que su papá "había cambiado mucho" desde que empezó a salir con ella.
"Son situaciones que a veces te descolocan un poco. Pero, repito, hay amor. Y creo que cuando es así, el amor siempre va a ser más fuerte", cerró, mostrándose absolutamente abierta a una futura reconciliación.