En lo alto de las montañas de las afueras de Barcelona, la familia habita una hermosa y minimalista mansión cúbica de 5 plantas.
Allá por el 2010, el Mundial de Sudáfrica y el famoso Waka Waka juntaron a Shakira (43) y Gerard Piqué (33). Si bien dejaron claro que no pretenden casarse, la pareja se ha convertido en una de las más queridas. Actualmente viven con sus dos hijos, Milan (7) y Sasha (5), en una lujosa mansión ubicada al pie de la sierra de Collserola, en Sant Just Desvern, a 10 kilómetros de Barcelona.
La propiedad familiar se encuentra en un terreno de 3.800 metros cuadrados y la sola superficie está valuada en casi un millón de euros. Ubicada a mayor altura que las construcciones aledañas, la casa tiene una vista privilegiada y puede verse desde distintos puntos.
Muy luminosa, la residencia posee ventanales de pared a pared en las tres plantas. El diseño minimalista de la construcción es obra de la prestigiosa arquitecta Mireia Admeller. La casa tiene 3 plantas de altura y dos plantas subterráneas, donde se encuentran la bodega y la cochera.
La mansión cuenta con hermosas habitaciones, baños con paredes de mosaico, salas para conferencias, salón de juego con billar y una enorme pantalla de televisión, sala de cine, pileta con cascada, amplio jardín con cancha de tenis y gimnasio.
Si bien ésta es la vivienda permanente de la familia, no es el único inmueble que poseen. En 2015 se hicieron propietarios de otro más pequeño por 5 millones de euros. La segunda casa de la famosa pareja tiene cuatro plantas y está ubicada cerca del estadio barcelonés del Camp Nou.