Tras seis meses de cuarentena, el primer bailarín del Teatro Colón reconoce que redescubrió la danza y las clases desde otro lugar. "Cuando uno se siente apretado en algo, tiene que saber dar vuelta la página", dice.
"Me encuentro en una situación de cuarentena, como todo el país", dice Juan Pablo Ledo (38). Fue alumno de Julio Bocca (53), estudió Derecho en la Universidad de Buenos Aires y es el primer bailarín del Teatro Colón. Su pasión por la danza es equiparable a su fe. Sueña con que las personas "vuelvan a sus casas felices y liberadas" luego de verlo bailar.
La pandemia lo sorprendió como a todos a mediados de marzo. Y, como la mayoría, jamás imaginó que la cuarentena podía extenderse tanto. "No pensaba que esto iba a ser tan largo. Tuve que hacer un proceso de adaptación a esta realidad", comenta.
Y cuenta que su vivienda se convirtió en espacio de danza. "Terminé bailando dentro de la casa. Como bailarín uno entrena en estudios enormes y prepara espectáculos cada mes y medio. Acá, uno se encuentra entre cuatro paredes y se pregunta: '¿Cómo sigue la vida'?"
Comenzó como muchos, aprovechando el tiempo libre "para leer más y escuchar algunas noticias". Luego sintió necesidad de moverse y hacer algo más. Hizo publicidad por redes sociales y comenzó a dar clases online. ¿Algo bueno de todo esto? ¡Sí! La posibilidad de tener alumnos de todo el país.
"Lo positivo fue empezar a trabajar desde un lugar más íntimo. Este proceso nuevo viene bien, porque no están desconcentrados: están frente a la cámara, como si fuera un examen. Conectan con lo visual. Los sentidos están puestos ahí", dice.
Más adelante comenzó a tener él mismo sus entrenamientos cotidianos. Tuvo que adaptar el espacio para poder moverse y, además de danza clásica, indagó en otros ritmos y estilos.
Más allá de la danza, cree que este tiempo le deja buenas enseñanzas. "Cuando uno se siente apretado en algo, cuando dice 'esto no va más', uno tiene que saber dar vuelta la página y animarse", afirma, convencido de que es un aprendizaje que sirve en cualquier instancia de la vida.
Y para esto, su esperanza juega un rol clave: "Hay una fe en ir por más que hace que las puertas se abran", remata.
Producción, video y edición: Chris Beliera.