La obra fue presentada por el gobierno de ocupación luego de que el Congreso argentino aprobara un endurecimiento de penas para la pesca furtiva en las aguas que rodean a las islas.
El gobierno de ocupación de las Islas Malvinas dispuso que se reemplace al viejo puerto por uno nuevo para cruceros y barcos de carga, que comenzará a construirse apenas se libere ese tipo actividades, que aún están suspendidas a causa de la pandemia por coronavirus.
El autodenominado gobierno isleño firmó un contrato con la constructora británica BAM Nuttall para el diseño y construcción de nuevas instalaciones portuarias que reemplazarán las actuales, a las que consideran obsoletas, según informó la agencia de noticias Mercopress.
En un comunicado, el presidente ejecutivo del FIG ("Gobierno de Falkland Islands"), Barry Rowland, dejó en claro que la nueva infraestructura será un “activo indispensable” para la economía y el crecimiento futuro de las Islas Malvinas.
Por su parte, Martin Bellamy, director ejecutivo de BAM, aseguró: “Estamos entusiasmados de ser parte de un proyecto de infraestructura nacional tan crítico para las Islas Malvinas y esperamos trabajar juntos con el Gobierno de las Islas Malvinas y nuestro equipo en el diseño y construcción del puerto que servirá como una nueva puerta de entrada a las Islas Malvinas".
Este proyecto forma parte del “Plan para las Islas” que formuló en 2018 el gobierno de ocupación de las Islas Malvinas con el objetivo de generar un centro naviero y de vínculos internacionales en el sector pesquero, que es considerado “vital para el crecimiento económico de las Islas Falkland”, y que es uno de los principales puntos de disputa con el gobierno argentino, que recientemente acaba de aprobar una ley para endurecer las sanciones sobre barcos que realicen pesca furtiva, incluidas las aguas que circundan las Malvinas
En cuanto a la obra, se construirá una plataforma de unos 400 metros por 60, con suficiente espacio de oficinas para la Capitanía y el Operador del Puerto. El objetivo es que en la cara Oeste embarquen los cruceros durante la temporada, con un área delimitada para mantener a los pasajeros que desembarquen alejados de las operaciones normales, como el manejo de cargas y operaciones de pesca.
En dicha plataforma habrá puntos de abastecimiento de servicios tales como agua potable y combustible para las naves, y la estructura además deberá contar con facilidades para movilizar una grúa de unas cien toneladas.
Richard Porter, director del proyecto de BAM, además explicó que en el extremo Este de la terminal habrá un amarre para embarcaciones pequeñas y un roll on-roll off, para el ferry Concordia Bay (que une a las dos grandes islas del archipiélago), a la vez que una pasarela de acceso en el lado Sur para las embarcaciones menores.
Además, la principal calzada de acceso tendrá dos sendas para tránsito pesado y un acceso peatonal adicional.
La actual estructura de FIPASS (Falklands Interim Port and Storage System), existente desde la finalización del conflicto, será totalmente removida.
“Si bien Covid 19 puede estar dominando nuestros pensamientos en la actualidad, estaremos prontos a comenzar a trabajar con BAM Nuttall en los primeros pasos para alcanzar este hito vital de infraestructura nacional, una vez que las restricciones vinculadas al Covid 19 se levanten. La necesidad imprescindible de un puerto nuevo en apoyo a la industria de pesca y otras industrias permanece tan presente como siempre”, señaló el legislador Barry Elsby, a cargo de la cartera de Desarrollo y Servicios Comerciales de las islas.