Además, la actriz disparó contra su amigo Miguel Bosé, quien dijo: "El virus no existe".
En la nota de tapa con GENTE, Cecilia Roth (64) habló, entre otras cosas, del amor, el #metoo, la violación que sufrió y pudo asumir tiempo después, la educación de su hijo Martín Páez (20) en el feminismo, cómo resignifica a sus grandes amores y reflexionó sobre "el odio" que promueven las expresiones anticuarentena.
En una charla íntima, preguntada acerca de cómo leía a la gente expresándose en contra de cómo el Gobierno está manejando la pandemia, la actriz de Crímenes de familia (dirigida por Sebastián Schindel y estrenada en Netflix el 20 de agosto) dijo: "Están más locos que una cabra. El nivel de suicidio colectivo que manejan es un horror a nivel sanitario y está pasando en todo el mundo".
Como ejemplo de personalidades que se expresaron descreyendo del poder del virus mencionó a su amigo Miguel Bosé, de quien dijo: "Hoy dudo de que sea mi amigo". Indignada, retomó sus declaraciones: "Dijo que el virus no existe, que es una manera de controlar el miedo, que nos quieren poner un chip y que no hay que vacunarse. Parece una parodia de las que hace Verónica Llinás".
–¿Te dolió que lo haya dicho él?
–Mirá, estuve pensando y me acordé que su padre, Dominguín, es fascista, viste, y esas cosas tienen peso. Obvio que uno también tiene pensamiento propio, pero nunca pensé que fuera capaz de hablar contra las vacunas. Es como los terraplanistas, pre-Galileo. Lo que más me entristece es que al principio de la cuarentena tuve la sensación que de ésta ibamos a salir todos mejor como mundo. Es dolorosísimo y me dan ganas de llorar, pero hoy pienso que no.
–¿Por qué te sentís desilusionada?
–Siento que los gobiernos populares y progresistas están siendo muy criticados en el mundo, más que nada por el avance de una derecha más dura. Pensá que en España está el partido Vox, que son franquistas, como si aquí hubiera uno “Videlista”. Yo siempre fui demócrata, que todos tenemos que pensar lo que queremos, pero la marcha fue una irresponsabilidad sanitaria de quienes lla provocaron, fue salir a contagiar y contagiarse. Si los mueve el odio, es muy triste. Me hizo acordar a la guerra civil española y los falangistas que promovían eso de "Viva la muerte".
Leé la nota completa a Cecilia Roth en la versión digital de GENTE.
Fotos: Gentileza Machado Cicala.
