Exclusivo. La pareja se había divorciado a comienzos de los Noventa. A pesar de la cuarentena, un juez los casará en la casa del ex presidente. El rol de su hija, la interna de su acercamiento y por qué Zulema juró acompañarlo hasta el final.
Tras estar internado en terapia intensiva por un grave cuadro de neumonía, se supo que a los 90 años el ex presidente (1989-1999) Carlos Sául Menem volverá a casarse con Zulema Yoma (77), madre de sus hijos Carlos Saúl Facundo y Zulema María Eva, y de quien se había divorciado a comienzos de los Noventa.
"Carlos Menem se casa la semana que viene con Zulema Yoma. Ella ha estado muy pegada a él en los últimos tiempos. Sacaron turno en el Registro Civil y un juez los va a casar en la casa, porque él tiene 90 años y tuvo un problema de salud", había anunciado el abogado Mauricio D'Alessandro.
"No hay interés económico", afirmó el letrado, quien aseguró que la intención de la ex pareja es "purgar el divorcio y sería como si nunca se hubieran divorciado. Acá, para la ley, ella volvería a estar casada como en el año 1966".
En charla con GENTE, D'Alessandro reveló que accedió a la información "gracias a una infidencia administrativa": "Fui a hacer un trámite al Registro Civil y cuando me contaban que se podía pedir el casamiento, siempre con excepciones, me contaron que la semana que viene se casan".
Desde el entorno del ex presidente aseguran que "él quiere estar al lado de Zulema y que lo cuide". Por eso es que, contrariamente a lo que afirmaron por años los especialistas políticos respecto a que "ella es la única mujer a quien le teme", hoy Zulema cumple un rol condescendiente con su ex marido.
"Ella es muy estricta y lo trata como a un chico travieso", aseguran amigos de la ex pareja. Pero habría un íntimo porqué en la decisión, que la ex primera dama le confiesa a su entorno. "Dicen que ella asegura que juró que iba a acompañarlo tanto en la pobreza como en la enfermedad, y que es eso lo que está haciendo", le comenta una fuente a GENTE.
Con respecto a un supuesto interés por la herencia, D'Alessandro aclaró en diálogo con GENTE: "Acá no hay herencia. Esos supuestos son plena invención del patriarcado que hace que se ponga énfasis en que una mujer tomaría esa decisión por un beneficio económico". Y enseguida se explayó: "Menem no tiene plata. Recordemos que aunque la tuviera, está inhibido y embargado por la causa de Río Tercero".
En ese sentido, señaló que "a Menem sólo le quedarían la jubilación y la pensión, que es un derecho que tendría ella en caso de quedar viuda. Pero aquí no es la gran preocupación, porque a ella le sobra la plata".
Recordemos que el matrimonio del senador con Yoma había terminado en escándalo en 1990, cuando por entonces Menem había echado a su esposa de la Residencia Presidencial en Olivos.
"Es el triunfo del amor... es una historia increíble", comentó D'Alessandro, quien aclaró que un funcionario público los casará en el domicilio de Menem. “Es un acto formal, con las restricciones que tiene hoy el sistema. Es una decisión de amor y no hay búsqueda económica, porque es gente que no lo necesita”, señaló el abogado.
La ex pareja se conoció en 1964 en Damasco (Siria) y se casaron en La Rioja dos años después. Durante la campaña presidencial, ella había contado que las diferencias religiosas no impedían su amor: "Él es cristiano pero yo soy musulmana".
Quien los acercó en los últimos tiempos fue Zulemita, la artífice de que puedan reencontrarse olvidando viejos rencores del pasado. Desde hace años se vienen mostrando juntos en fotografías publicadas en redes sociales, rodeados por sus nietos.
"Zulemita es quien colabora con ese acercamiento, les lleva a los nietos, está permanentemente cerca y pone paños fríos, siendo una verdadera árbitro en esa situación", aseguran.
El sorprendente anuncio de la boda coincide con la noticia del enlace de Cecilia Bolocco con el magnate comunicacional chileno José "Pepo" Daire. Y no sería justamente casual ya que, según indica una fuente allegada a la mamá de Zulemita, "Zulema la tiene entre ceja y ceja y por eso se habría apurado".
"A Bolocco la consideran una arribista que se aprovechó de él y lo dejó porque no había plata", se anima a afirmar su entorno, que afirma "que se odian" y que no mantienen ningún tipo de relación.
