El cocinero narró una experiencia de los tiempos como pupilo en un colegio privado que, según dice, "aún no tengo resuelta".
El jurado de Bake off (Telefe) estuvo invitado a la mesa de PH Podemos hablar (Telefe) junto a Romina Malaspina (23), Flor Vigna (26) y Benito Fernández (60). Los participantes contaron conmovedoras historias bajo la consigna "Los que alguna vez sintieron que su vida corrió peligro". Al tocar su turno, Christophe Krywonis (55) avanzó y relató una estremecedora anécdota.
"Tenía 11 años y fue un hecho... Éramos un grupo de muchos amigos pupilos en un colegio privado. Yo tenía que ir al colegio y decidí no ir", comenzó contando el chef. "Era domingo y al día siguiente no quería ir a la escuela, dije: 'No voy, no voy y no voy'. Me tomaron la temperatura y tenía 39 de fiebre... Dije: '¡Genial, no voy!'". Y ese lunes que –por algo que aún no entiende– no asistió a clase, uno de sus compañeros llevó una granada de la Segunda Guerra Mundial, con la que estuvieron jugando toda la tarde, hasta que uno de los chicos quiso desatornillarla.
"Dos de mis amigos murieron y otros tres quedaron amputados", contó, dejando a todo el piso sin palabras. "Esta historia todavía no la tengo totalmente resuelta. ¿Por qué no quise ir a la escuela? Y me da escalofríos", finalizó.
En otra parte del programa conducido por Andy Kusnetzoff (49), Christophe se enfrentó a Samanta Casais (29) por videollamada. Luego de pedirse disculpas y sincerarse frente a frente, el jurado del programa más dulce de la televisión fue consultado sobre a cuál de los dos finalistas elegiría para trabajar con él, si Samanta o Damián "Pier" Basile (31): "Damián está en Rosario, así que a Samanta, sin problemas. Aunque debe aprender más, porque todavía le falta pulir algunas cosas".
