Fue Héctor Xavier Monsegur, conocido como 'Sabu', quien inclusive llegó a delatar a varios de sus ex compañeros.
Anonymous está en boca de todos y todos hablan del grupo de hackers que tiene en vilo al mundo luego de volver con sus denuncias a causa del brutal asesinato del ciudadano George Floyd en manos de la policía de Minneapolis.
Una de sus primeras acciones fue haber dejado al descubierto una red de pedofilia coordinada por el ya fallecido Jeffrey Epstein y que involucra a muchos famosos, y luego se viralizó una supuesta fotografía de Donald Trump al desnudo que habría sido filtrada por Anonymous.
Pero hace nueve años, esa organización de expertos informáticos sufrió un duro golpe cuando uno de sus integrantes los delató y terminó colaborando con el FBI .
La historia de la traición comenzó en 2011 cuando un grupo de hackers informáticos le habían robado una serie de grabaciones inéditas de Michael Jackson a la compañía discográfica Sony Music. Por entonces, la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Manhattan informaba que habían vinculado con esa operación a seis hackers en Estados Unidos, Inglaterra e Irlanda, uno de los cuales se declaró culpable.
Monsegur fue capturado el 7 de junio de 2011. Tan sólo un día después de su detención, accedió a colaborar con el FBI como informante; el resultado más publicitado su cooperación fue la detención de cinco hackers ligados a Anonymous, LulzSec y Antisec, el 6 de marzo de 2012.
Se los acusó, entre otros delitos, de robos de identidad y de ataques informáticos contra Visa, Mastercard, Nintendo y el canal Fox. De ese grupo hubo un "arrepentido", que saltó a la fama por su nickname "Sabu".
La persona detrás del hacker
Héctor Xavier Monsegur era conocido en el mundo hacker como "Sabu" -le tomó el nombre a un luchador- y gracias a su cooperación, la justicia pudo ubicar a los otros implicados.
Su aporte fue clave: llegó a detener al menos 300 ciberataques que tenían como objetivo instituciones públicas y privadas de Estados Unidos, tales como el Ejército o el Congreso.
Sabu fue a juicio y su su colaboración fue catalogada de suma importancia y beneficiado con una pena considerablemente menor a la que le hubiera correspondido: de los entre 21 y 26 años con los que se castiga ese tipo de delitos solo cumplió 6 meses. Además, se le otorgó una nueva identidad para evitar que sufriera represalias por su traición.
Además, hubo otro suceso clave que tuvo en cuenta la justica de Estados Unidos para dejarlo en libertad: Monsegur (que actualmente tiene 36 años) había sido clave para capturar a Jeremy Hammond, por entonces "cibercriminal más perseguido del mundo", quien fue condenado a 10 años en prisión.
Trabajando todo el día con agentes del FBI a su lado, el hacker "dio información en tiempo real sobre ataques informáticos que ocurrían al momento y de vulnerabilidades en sistemas importantes de computadoras", escribieron los fiscales por entonces.