En un 3J particular debido al aislamiento y a horas del estreno de 'La fiesta silenciosa', el film que interpela en torno a "quién maneja la violencia", la actriz habla de los cambios que hubo desde la primera marcha Ni Una Menos.
Hoy, 3 de junio, se cumplen cinco años desde la primera marcha Ni una menos, en la que miles de mujeres marcharon para visibilizar la violencia contra la mujer y el creciente número de femicidios. A horas del estreno de su nuevo filme, La fiesta silenciosa, en el que encarna a una mujer "de 40 años que está a punto de casarse, un poco presionada por la sociedad y la cultura, porque siente que ya es hora", Jazmín Stuart (44) habla sobre los cambios que están ocurriendo en la sociedad.
Aunque la violencia sigue avanzando: en lo que va del año se registraron 133 femicidios y 29 travesticidios. Además, de 19 mujeres desaparecidas. La violencia contra la mujer se incrementó durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio, razón por la que debieron aumentaron las medidas de atención a la víctima.
“Por suerte, hubo muchos cambios desde entonces. Lo más importante es que masivamente nos organizamos y nos unimos entre mujeres. Desde la primera marcha impulsaron cuestiones de género en la agenda mediática y política. Yo creo que desde la primera marcha Ni una menos nos despertamos y estamos transformando la realidad”, asegura Stuart, miembro del colectivo Actrices Argentinas.
La actriz destaca el valor que tuvo “entender que había algo del sistema que nos tenía alienadas. Nuestras abuelas vivían cada una dentro de su casa haciendo las tareas domésticas, no se reunían para militar o preguntarse por qué tenían que ocupar ciertos roles. Cuando hablo una y otra vez de la unión entre mujeres, me refiero a algo que nos estaba vedado. Ahora lo pudimos conseguir y es irreversible", asegura.
"Todas las transformaciones que hagamos en el mundo tienen que ver con el hecho de habernos juntado", sentencia. Y analiza algunas cuestiones que cambiaron: "Quizás antes que tu jefe te tocara en el trabajo era “efecto colateral” de moverte en un mundo de hombres y ahora ya sabemos que no es así. Se trata de advertir, nombrar, señalar y transformar. Esa es la dinámica”, dice refiriéndose a la acción de diversos grupos que buscan visibilizar y accionar en relación a la violencia contra la mujer.
El activismo de Actrices Argentinas
"Actrices Argentinas es una organización apartidaria en su accionar. A ver si se entiende: somos muchas mujeres, algunas ni siquiera tienen partido político. Trabajamos como activistas, no tiene nada que ver con lo partidario. El trabajo que hacemos es tan vital e importante y, a veces, silencioso que llevar la atención a una puja que no tiene nada que ver con el trabajo humanitario que estamos haciendo es estéril", explica Jazmín Stuart en referencia a críticas que recibe la organización por su sesgo partidario.
Y entonces, busca rastrear porque se critica a la asociación. "Para ciertos sectores es tan disruptivo nuestro deseo de transformar ciertas cosas que una de las maneras que encuentran de criticarnos tiene que ver con lo partidario que es absurdo. Les incomoda lo que hacemos junto con otras tantas organizaciones feministas y está bien porque es señal de que estamos haciendo lo correcto", dice.
Respecto a cuál es se camino, la multifacética Stuart señala que tiene que ver con "generar redes de mujeres porque cuando nos unimos y nos organizamos tenemos más chances de transformar ciertas realidades". Y entonces, enumera por qué luchan: "Buscamos mayor equidad, terminar con la brecha salarial, que las mujeres ocupen los mismos espacios de decisión, que puedan acceder a la misma retribución económica que un hombre"
"Buscamos que dentro del ámbito de la política las voces femeninas se escuchen tanto como las masculinas. Nos interesa que haya espacios de liderazgo ocupados por mujeres. Peleamos para que la educación sexual integral sea una realidad en todas las escuelas argentinas y apunte a erradicar la violencia de género desde la infancia. Luchamos para transformar la realidad cotidiana, para que dejen de violar y asesinar mujeres sistemáticamente", señala.
Sinopsis de La fiesta silenciosa en primera persona
Jazmín sintetiza la trama de la película y explica cuáles son a su modo de ver los principales planteos del filme.
"Laura de 40 años que está a punto de casarse, un poco presionada por la sociedad y la cultura, porque siente que ya es hora. La boda se va a llevar a cabo en el campo de su padre que es un hombre muy fuerte, algo dictatorial en un punto, y que contrasta mucho en algún modo con el hombre con el que ella se va a casar que es bastante frágil y blando", cuenta la actriz.
Esa información sobre las personalidades es clave para entender cómo se desarrolla la historia. "Hay algo de estar entre esos dos hombres y sentirse presionada por el compromiso que está por asumir que en un momento la hace irse a dar una vuelta por el campo. Termina metiéndose en una situación en la que se siente atropellada en muchos sentidos", dice y así concluye la presentación de los personajes.
"La película cuenta qué es lo que ella decide hacer con esa situación que le toca vivir. Habla mucho de lo que sucede cuando una mujer hace uso de la violencia para lograr justicia por manos propia. Habla de cómo el mundo de los hombres no deja muchas veces que la mujer se apropie de su ferocidad o de su enojo o de su deseo de hacer justicia. ¿Quién maneja la violencia?", concluye Stuart dejando abierto el interrogante que plantea la película.
Fotos: Fabián Uset.