Mikaela, de 23 años, menifestó que tiene todo el apoyo de su padre.
Mikaela, la hija adoptiva de Steven Spielberg, de 23 años, reveló que está trabajando como una estrella porno, mientras habla sobre el abuso sexual que sufrió cuando era niña.
En una nueva entrevista, la estrella de cine para adultos con sede en Nashville, que fue adoptada como bebé por Spielberg, de 73 años, y su esposa Kate Capshaw, de 66 años, revelaron que solo recientemente les contó a sus padres sobre su nueva línea de trabajo, pero dijo que han apoyado mucho su elección de carrera.
"Mi seguridad siempre ha sido la prioridad número uno para ellos", dijo a The Sun, mientras revelaba que les había dado la noticia a través de FaceTime durante el fin de semana.
"Estoy haciendo esto, no por la necesidad de lastimar a nadie o ser rencoroso, lo hago porque quiero honrar a mi cuerpo de una manera lucrativa".
Describiéndose a sí misma como una “criatura sexual”, Mikaela continuó explicando que estaba ansiosa por encontrar una manera de 'capitalizar su cuerpo', habiéndose frustrado por trabajar en un trabajo más tradicional que 'no estaba satisfaciendo su alma'.
También compartió que su nueva carrera le ha dado una sensación de empoderamiento y confianza que nunca pensó que podría tener, revelando que sufrió abusos a manos de abusadores cuando era niña, que más tarde provocó una serie de problemas de salud mental.
En los últimos años, Mikaela ha luchado con la anorexia, el trastorno límite de la personalidad y el alcoholismo, todo lo cual, según ella, es el resultado del abuso sexual infantil. Sin embargo, ella señala que sus abusadores no eran parte de su familia, ni del círculo íntimo de amigos de sus padres.
Mikaela, que está comprometida con Chuck Pankow, de 47 años, explicó que el trabajo que ahora está haciendo en la industria del porno la hace sentir "bien" porque puede "satisfacer" a otros sin ser "violada".