El 30 de diciembre se cumplen 15 años de la trágica noche que fallecieron 194 personas y más de 1400 resultaron heridas producto de una bengala arrojada en medio de un recital del grupo Callejeros y que provocó un incendio. Para recordar a las víctimas el lunes se inaugura un faro y un monumento.
Zapatillas, remeras, mochillas, llaves, banderas. Las pertenencias de las víctimas y de los sobrevivientes fueron lo único que quedó en Cromañón después de la trágica noche del 30 de diciembre de 2004, cuando fallecieron 194 personas y más de 1400 resultaron heridas producto de un incendio durante un recital del grupo de rock Callejeros. Las cosas estuvieron allí, tiradas en el piso, durante 14 años. Hoy limpiaron todo eso y están construyendo un monumento en homenaje a las personas que fallecieron. Aunque siempre hubo lugares donde rendirles tributo en plazas, placas o calles con sus nombres la meta era encontrar un sitio donde eternizar su recuerdo. Los familiares y sobrevivientes querían que el boliche se convirtiera en un santuario. "Cuanto más homenajes haya mejor se preservará la memoria. Pero el lugar no se conservó y allí estaba la historia, las marcas de nuestros hijos queriendo salir, las marcas de sus manos en hollín queriendo salir de esa trampa. Si el estado estuvo presente para matar debía estar presente para preservar la memoria", dijo uno de los familiares de las víctimas de Cromañón que pertenece a la asociación civil Que no se repita y no dejan de expresar su profundo dolor.
El lunes se cumplen 15 años de la tragedia, los amigos y familiares de las víctimas no se olvidarán nunca de esa noche. El proyecto para recordar a las víctimas es realizar un gran muro, un faro de 25 metros con todos los nombres de los fallecidos y un árbol de una especie considerada de las más antiguas del mundo. El recuerdo de las víctimas está presente en varios lugares, pero en el Parque de la Memoria tendrá un sitio definitivo.