En el exclusivo complejo residencial de Fisher Island, en Miami: Susana Giménez. En el
country La Cañada de Open Door, provincia de Buenos Aires: Sol
Bunge. En la chacra Yellow Rose, en Punta del Este: Jorge Rodríguez.
Así, sin amores, pasaron el sábado 14 de febrero: "Día de San Valentín", para
algunos; "Día de los enamorados" para el resto del mundo.
Del Este a Open Door. Desde que se supo de su romance con el ex de Susana, Sol
Bunge decidió refugiarse en su country familiar para escaparle a los flashes.
Muchos recuerdan hoy, sus épocas de devoción a la exposición: "Adoraba
mostrarse, sobre todo en amplios escotes o remeras bien ajustadas para lucir sus lolas nuevas. Si hasta trabajó con Ginette Reynal y Gerard Confalonieri
convocando gente para cenar en la disco Tequila…", cuentan. Lo cierto es que
ahora, Bunge busca el bajo perfil. Por eso, este año, avisó a sus amistades que
no festejaría su cumpleaños número 31 (fue el jueves 12, doce días después del
de Susana, quien también lo pasó sola en Fisher Island) porque lo pasaría junto
a unos pocos íntimos en su casa de campo.
Desde que en noviembre del año pasado conoció y se enamoró de Corcho, como ella
misma lo llama, Bunge cambió radicalmente de costumbres: dejó, definitivamente,
la movida nocturna de Baires y Punta. "Con razón este verano no me la crucé por
Pachá, Tequila, ni la vi por los eventos", comenta ahora un habitué de la noche
porteña.
Dicen que verse en la tapa de las revistas la hizo estallar en llantos. "Al
principio estaba preocupada, angustiada, no quería que Jorge se enojara con
ella, que pensara que lo había traicionado. Trató de comunicarse con él durante
todo el martes y le fue imposible: Rodríguez estuvo un día entero sin atenderle
el teléfono. Recién el miércoles la llamó para decirle que no se preocupara, que
estaba todo bien, pero que por un tiempo iban a tener que dejar de verse",
asegura uno de los pocos íntimos que lograron comunicarse con Sol en su
cumpleaños. Se sabe que la frase exacta habría sido: "Evitemos los encuentros
por un tiempo, hasta que se calme un poco la prensa. Esto es así: te persiguen
los primeros diez días y después se olvidan".
Con chofer, en limousine y sin amor. Así se la vio a la diva en Miami el último fin de semana. El sábado 14 habló con su ex para saber cómo estaba.
Corcho Rodríguez, motorizado en el Este. El sábado llamó a su chica para el Día de los enamorados y también habló con Susana. A Sol, le pidió un tiempo. A Su, le aseguró que necesita estar solo.
