Pocas veces en la historia de los premios latinos de la música, que cumplen este año dos décadas, se había vivido un momento reivindicativo como este.
La artista chilena Mon Laferte aprovechó la alfombra roja de los Grammy Latinos, que se celebran este jueves en Las Vegas, para protestar por la violencia que vive su país.
Durante las fotos, ante cientos de medios internacionales, se mostró con el vestido abierto y sobre su pecho mostró un mensaje rotundo: “En Chile torturan, matan y violan”. Y sobre su cuello, un pañuelo verde a favor de la legalización del aborto.