Sin admiradores a la vista, fuertemente custodiada por sus hijos –Giuliano (6), Gianluca (10) y Giovanni (13)– y con mejores curvas que nunca, así se la vio a Carolina Baldini (36) por las paradisíacas playas de Miami. Su diminuto bikini negro no permite mentir: está más diosa que nunca. La modelo y aprendiz de conductora de radio y televisión aprovechó la interrupción de los estudios que sigue bajo la tutela del prestigioso periodista Guillermo Petruccelli, por las vacaciones de invierno, y se embarcó rumbo a las playas de South Beach.
La Chola suele renegar en general del periodismo. Sostiene que es una profesión que no le agrada. Prefiere estar al frente de un programa propio como conductora. “Es que no soy una mujer curiosa. Además, no me gustaría tener que manipular la información. Yo lo sufrí en carne propia y tengo buena memoria. Perdono, pero no olvido”, apuntó contra la prensa la ex esposa del director técnico de San Lorenzo, Diego Simeone, que por estos días se encuentra de pretemporada junto al plantel de ese club en Colonia del Sacramento, Uruguay.
Conocedor de las pasiones que despierta Caro, a esta altura usted se estará preguntando si por estas arenas no apareció su amigo, el guardavidas apodado He Man, Fabián Orlovsky, como lo había hecho en varias ocasiones por diferentes playas del mundo. Pero no. Esta vez Baldini disfrutó de un mini-descanso en familia, rodeada también de amigos.
Además de dorarse al sol y mimar a sus hijos todo el tiempo, Carolina dedicó bastante tiempo a recorrer de punta a punta la peatonal Lincoln Road en busca de las mejores casas de moda. Se alojó en el hotel Setai, un íntimo resort frente al mar instalado en el corazón de South Beach, sobre la avenida Collins, rodeado de jardines tropicales, tres piscinas y un spa increíble.
Quienes la conocen más que bien aseguran que está sola, sin amores, reflexionando acerca de su futuro, tanto a nivel sentimental como profesional. La Chola fue una de las tantas celebrities que visitaron Miami en los últimos días. También estuvieron el cantante Diego Torres y su novia, la modelo Deborah Bello, Florencia de la V, Zulemita Menem, Daniela Urzi y Claudia Villafañe acompañada de sus hijas, Dalma y Gianinna y su pequeño nieto, Benjamín.
El look de Baldini fue más que comentado por los argentinos presentes entre camastros y sombrillas. Su cuerpo y su dos piezas de color negro despertaron más de un acalorado comentario masculino. Pero ella hizo oídos sordos: sólo los tuvo para escuchar los piropos de tres hombres: Giuliano, Gianluca y Giovanni, que la cuidaron a sol y a sombra. 
La Chola en plena caminata por las arenas de South Beach, junto a la férrea compañía de su hijo Gianluca. Otra vez se la volvió a ver con una figura impactante, pero siempre en familia.
De día se dedicó a tomar todo el sol posible y a jugar con sus hijos en el mar. También atendió numerosos llamados provenientes de la Argentina. Se alojó en el hotel Setai, un íntimo resort frente al mar instalado en el corazón de South Beach, sobre la avenida Collins, rodeado de jardines tropicales, tres piscinas y un spa increíble. Lució radiante: las imágenes no mienten.
Baldini siempre lució impecable, tanto en la reposera tomando sol como cuando llegó y se fue de la playa, acompañada por su hijo mayor, Giovanni, de 13 años.
