Tiene 24 años. Su condición de transformista artístico y cosplayer trascendió cuando Alberto fue consagrado candidato por el Frente de Todos. Antes de la votación subió una vieja foto suya con Néstor Kirchner en el despacho presidencial.
“Sé que es tarde, pero quiero recordarles que independientemente de a quien voten, hoy es un día para celebrar la democracia, un logro que como sociedad nos ganamos. Nunca perdamos nuestra libertad, que es lo mejor que tenemos”, posteó en su cuenta de Twitter a las 3:04 del día D.
Luego se encargó de bromear –aunque bien en serio– desde esa misma red en la que se hace llamar @dyhzyx (Soy esa extraña dama que está dispuesta a vencer), suma 84,8 mil seguidores y suele dar a conocer sus sensaciones, pensamientos y obra artística Estanislao Fernández (24), transformista artístico, cosplayer autodefinido también como Drag Queen, Cosplayer y Streamer, e hijo de quien catorce horas y 56 minutos después sería electo como el 35º presidente constitucional argentino.
“Admito que cuando me enteré de que papá iba a encabezar la fórmula del Frente de Todos junto a Cristina me largué a llorar, tuve una crisis. Nunca voy a estar preparado para que se siente en el sillón de Rivadavia”, había asegurado semanas antes en una entrevista con el youtuber Pablo Agustín, al tiempo que admitía: “Ahora me pasa que me van conociendo en distintos lugares. El otro día llegué al trabajo y un tipo me mandó: ‘Vos sos el hijo de mi esperanza’. Y ahí pensé: ‘¡Qué paja!’”, sostenía durante el reportaje.
Y añadía: “Sé que no estaría acá si no fuera por mi viejo, pero también el tema me quita la posibilidad de crecer por mis propios méritos”.
“Cuando hablo de él lo que siento es orgullo”, aclararía al rato Alberto sobre Estanislao, fruto de su relación con Marcela Luchetti, de quien se divorció en 2005.
“Es uno de los tipos más creativos que conocí en mi vida. Trabaja como diseñador gráfico y multimedia, alquila un departamento en Belgrano con su novia (Natalia Leone)... En verdad, yo lo admiro”, lanzaría sin imaginar –o sí– la respuesta de su único heredero frente a ciertas críticas anónimas de las que abundan en la web, cuando él ya había sido elegido para presidir el país: “Yo no hago política. Soy un puto loco al que no le alcanzaba una sola personalidad, y entonces decidió tener dos”.
