El suizo, que mantiene una gran relación con el español desde que eran adolescentes, contó por qué no estuvo entre los 350 invitados a la fiesta.
Rafa Nadal y Roger Federer son rivales desde el año 2006, cuando el español, siendo un adolescente, llegó a lo más alto del mundo del tenis para destronar al suizo, el campeón del momento. Desde entonces, enfrentaron en treinta y ocho ocasiones (la mayoría en finales de torneos internacionales o Grand Slams), con quince victorias para Federer y veintitrés para Nadal.
La semana pasada se especulaba con la posibilidad de que Roger Federer estuviera entre los más de 350 invitados al enlace de Rafa Nadal y Xisca Perelló en Mallorca, igual que otros compañeros de profesión del novio como, Pico Mónaco, David Ferrer o Carlos Moya, finalmente el suizo no estuvo presente y quiso contar por qué.
Aunque Federer es uno de los tenistas con los que este ha tenido una relación más cercana desde que comenzaron a competir por el título mundial de tenis, parece que ese no fue motivo suficiente para que estuviera entre los asistentes a la boda, algo que el suizo ya preveía.
“No fui invitado, cosa que ya esperaba” afirmó el tenista, tras lo que ha querido aclarar que aunque el español y él se llevan “muy bien”, ”en una boda solo invitás a las personas con las que querés compartir la mayor parte de tu tiempo”.
“No es un problema para mí. Le felicité por su matrimonio. Sabía que no me contestaría de inmediato porque tendría mejores cosas que hacer, como estar de fiesta. Estoy muy feliz por él y espero que haya pasado un día estupendo” comentó el suizo en una rueda de prensa previa al ATP 500 de Basilea.